Cómo sacar partido al Excedente de Libre Disposición

María Eugenia Jiménez, directora Brain Invest, dice qué opciones hay para retirar e invertir este dinero que puede ser clave para su jubilación.

No todo el dinero que ahorró para su pensión debe ir literalmente para su pensión. Los estrategas de inversiones para el retiro recomiendan que, al momento de jubilarse, una parte del dinero que acumuló en su AFP, APV o depósitos convenidos, lo retire en la forma de Excedente de Libre Disposición (ELD). “Siempre recomiendo que lo retiren aunque disminuya el monto mensual de pensión”, dice María Eugenia Jiménez, directora ejecutiva de Brain Invest, una empresa de asesoría previsional. “Al retirar el excedente se pagan menos impuestos que sacando ese dinero a través de la pensión”.

De hecho, cada año son cerca de 15.000 personas que hacen uso del beneficio tributario que implica el ELD, en un monto promedio de unos 13 millones de pesos.

El Excedente de Libre Disposición es el dinero que uno ahorró a través del sistema de AFP/APV y que supera el monto que, en un plan de retiro, permita una pensión mayor o igual al 70% del promedio de ingreso mensual cotizado en los 10 años anteriores (ese ingreso debe ser, además, superior a la Pensión Máxima con Aportes Solidarios, que es de $279.427 mensuales). Es decir, todo aquel capital que permite tener una pensión que supere el 70% de su sueldo de los 10 años previos al retiro es de libre disposición, el cual se puede retirar sin pagar impuestos.

Pero, al igual que todos los dineros que cuentan con beneficios tributarios, el ELD tiene un límite: un máximo de retiro de 800UTM -$35.964.000-, si se extrae de una sola vez, o de 1.200UTM -$53.946.000- que se pueden retirar en varios años, con un máximo de 200UTM anuales. Jiménez explica que el riesgo de elegir la segunda opción es que, en caso de que el pensionado muera, los beneficiarios legales (viudos o familia) no podrán extraer ese dinero.

“La mayoría de las personas que asesoro, porque tienen un alto patrimonio, no destinan ese dinero para vivir”, dice Jiménez. “En general lo hacen pensando en usarlo, ya sea para pagar deudas o para invertir en alternativas menos restrictivas y más rentables que el dinero que va a un plan de retiro tradicional”. La asesora habló con El Mercurio Inversiones para conocer un mejor uso para este dinero que puede ser determinante a la hora de jubilar.

-¿Por qué usted recomienda que siempre que se pueda, se retire el ELD?

Al retirar el excedente se obtiene una plata que sale del sistema previsional y, por lo tanto, el afiliado hace lo que quiera con ese dinero. Además, puede dejarlo en herencia. Si se muere y no retiró el excedente, la viuda o el viudo no pueden extraer ese capital. Además, hay dos elementos importantes por los que recomiendo retirarlo: primero, siempre se paga un menor impuesto del que se pagaría si se recibe como pensión; segundo, tiene que ver con la libertad de los ahorros previsionales, cuando la persona lo retira lo puede destinar a lo que desee, en cambio la pensión está limitada.

-¿Qué usos recomienda dar a ese excedente?

Para los profesionales y ejecutivos que les va bien, pero que tiene un alto nivel de gastos debido a tener varios hijos o un nivel de vida exigentes, el excedente les viene muy bien: les permite refrescarse, sabiendo que ya van a lograr una buena pensión con el resto de sus platas ahorradas. El ELD les sirve para unas vacaciones al inicio de su jubilación o para algún gasto que hayan postergado. Por otra parte, para la gente que requiere de todo el dinero ahorrado para construir su pensión, también le recomiendo que retire el excedente y planifique cómo lo va a gastar. En general, lo principal es pagar y estructurar sus deudas. Es como un alivio. De ahí en adelante quedan más ordenados, ya no se pueden dar tantos lujos, porque es una etapa distinta de la vida.

-Al momento de retirar el excedente, ¿qué consideración se debería tener para que sea más eficiente?

Un aspecto a considerar es que el beneficio tributario del ELD es más notorio si el contribuyente solo tienen un empleador y no reciben otro ingreso (dividendos, rescate de inversiones…), pues en este caso el retiro exento no paga impuestos. Las personas que tienen otros ingresos pagarán un poco más por el retiro de ELD exento, ya que el retiro se suma al total de sus ingresos del año. Si el monto de ELD exento lo hace cambiar de tramo, pagará más.

Otro factor a considerar es que el monto exacto en UTM se fija al valor del 31 de diciembre de cada año. Por tanto, si la persona realiza el retiro en meses anteriores a diciembre debe solicitar un poco menos, ya que ese monto se actualizará en el año que realizó el retiro y puede que exceda las UTM máximas para ser exentas. En este caso tendrá que pagar algo de impuestos.

-Las personas que tienen Ahorro Previsional Voluntario desde antes de 2001, tiene aún más beneficios en el retiro de este excedente. ¿En qué consisten?

Hay una ley que entró en vigencia en 2002 que establece que todos los que tenían APV hasta esa fecha pueden retirar esa plata con la ley que estaba vigente hasta ese año, la cual es muy beneficiosa. Primero, porque es un impuesto único, por tanto no se suma al global complementario, y, segundo, el impuesto afecta solo a aquellos saldos que sean sobre 70 millones de pesos. Si un cliente tiene alrededor de 40 millones ahorrados no paga nada de impuestos. En cambio, si dejan esa plata y la aportan a su pensión, pagarían el impuesto complementario. Si la persona tiene sobre 70 millones, sí le cobran impuestos, pero incluso en estos casos es más beneficioso retirarlo. El impuesto se calcula solo el 10% del ahorro, es decir, una persona con derecho a retirar 106 millones y que paga una tasa del 1,1%, termina pagando $1.600.000, el cual es retenido por la AFP, la que lo entrega a las arcas fiscales.

-¿Qué tipo de personas se ven beneficiadas con esta ley?

Ese tipo de clientes que ahorró desde los años 90 hasta principios de 2001 y después continuaron, es gente, en su mayoría, que fue gerente de área de alguna compañía y ganaba, en plata de hoy, sobre 4 millones de pesos líquido. Esa persona, si ha continuado haciendo ahorros máximos de 50 UF mensuales y además ha hecho depósitos convenidos, tienen sobre 700 millones de pesos ahorrados, entre la cuenta APV, la obligatoria y los depósitos convenidos.

-¿En qué conviene invertir este excedente?

Hay alternativas en Chile y en el exterior. Entre lo que yo manejo, hay algunos Fondos Mutuos que hacen que los retornos que se obtengan paguen menos impuestos, por lo que son interesantes para algunas personas. Otro tipo de inversiones es en el sector inmobiliario. Hay personas que utilizan el dinero del excedente para pagar un pie o comprar un departamento y con eso tienen un complemento para su pensión al arrendarlo. En los últimos tres años los departamentos han estado muy caros, pero vamos a empezar a ver caídas, lo que puede ser una oportunidad. Aunque no hay certeza de que los arrienden en el corto plazo, generalmente los departamentos chicos tienen buena salida.

Publicado en El Mercurio.